EXCLUSIVA: Enfrentando a Jason, Terrifier y la nueva casa de la WWE en Halloween Horror Nights de Universal
De día, me sumergí en la magia de los parques de Universal, pero de noche, me aventuré en las 10 casas encantadas del 34º evento anual de HHN ahora que la temporada de terror está en pleno apogeo
El calor del verano se aferraba al aire, pero dentro de mi hotel en el parque temático Universal Orlando, un escalofrío me recorría la espalda. Era finales de agosto en el Sapphire Falls Resort, pero la vibra era de puro terror gótico.
Estaba allí para celebrar la apertura de Halloween Horror Nights 2025, y aunque aún no era otoño, los gritos, los monstruos y las casas empapadas de sangre dejaban claro que la temporada de terror había comenzado de verdad.
De día, me sumergí en los parques de Universal: Epic Universe, Islands of Adventure, Universal Studios e incluso un escape tranquilo a Volcano Bay. Pero de noche, me aventuré en las 10 casas encantadas del 34º evento anual de HHN, incluyendo el sangriento Terrifier, el campo de juegos del slasher Jason Universe y las pesadillas teatrales de los Wyatt Sicks de la WWE.
El viaje comenzó en Epic Universe, donde atravesar sus portales fue como pisar un set de filmación. Dark Universe rezumaba energía de Halloween: pueblos embrujados, figuras sombrías y la presencia amenazante de algunos de los personajes más aterradores del mundo.
En Monsters Unchained: The Frankenstein Experiment me lanzaron de un lado a otro en un brazo robótico mientras me enfrentaba cara a cara con Drácula, Frankenstein y la Momia.
Me llevaron a un frenesí en la montaña rusa Curse of the Werewolf y observé con asombro cómo la Taberna The Burning Blade estallaba en llamas.
Luego viajé a través de un corredor Metro-Floo hasta la atracción Harry Potter’s Battle at the Ministry, persiguiendo a Dolores Umbridge mientras intenta escapar de su juicio. Después llegó el vibrante caos de Super Nintendo World, lleno de color, sonido y nostalgia. No podía dejar de sonreír mientras competía con amigos en Mario Kart y saltaba sobre los rieles rotos de Donkey Kong’s Mine-Cart Madness.
How to Train Your Dragon – Isle of Berk fue otro punto destacado, con barcos vikingos balanceándose en el puerto de fuego e incluso la oportunidad de conocer a Toothless.
En Islands of Adventure, agarré con fuerza la barra en la VelociCoaster y luego volé en Hagrid’s Magical Creatures Motorbike Adventure, serpenteando a través del Bosque Prohibido.
Viajar en el Hogwarts Express entre parques me dio escalofríos, especialmente al bajarme en el Callejón Diagon en Universal Studios, donde los adoquines parecían vibrar con magia.
A mitad del viaje, me tomé un descanso de los gritos y la adrenalina con un día en Volcano Bay. Desde una cómoda cabaña, disfruté de cócteles y un escape tranquilo entre tirarme por los toboganes de agua y flotar a lo largo del río lento.
Durante unas horas, no pensé en monstruos ni montañas rusas, solo en el sol, el agua acogedora y el imponente volcán Krakatau en la distancia.
Y luego llegó la noche que nunca olvidaré: Halloween Horror Nights: 10 casas encantadas, cada una más intensa que la anterior y no aptas para cardiacos (o menores de 13 años).
Jason Universe, que fusiona todas las películas de Friday the 13th, fue mi favorita, a pesar de que me asusté de muerte en un pasillo interminable del infierno de los sustos (dije de muerte).
Terrifier fue inolvidable de la peor (mejor) manera, mientras el grotesco Art the Clown desmembraba a sus víctimas antes de invitar a los invitados a salir por el "camino seco" o el "baño de sangre".
Es la primera casa "sin clasificación" de Universal, con 35 cuerpos, seis galones de sangre y los olores más fétidos que he experimentado, y vivo en una granja.
Casi pierdo el contenido de mi estómago en la escena del baño, donde las entrañas se derramaban de los lavabos y los cadáveres flotaban en las bañeras, todo mientras Art bailaba al ritmo del inquietante jingle del Clown Cafe.
La casa de los WWE Wyatt Sicks combinaba una narrativa teatral con escenas que me hicieron aferrarme a mis amigos chillones.
Galkn: Monsters of the North y Dolls: Let’s Play Dead también fueron perturbadoras de diferentes maneras, y los animatrónicos de Five Nights at Freddy’s, creados por Jim Henson’s Creature Shop, no hay que perdérselos.
Pero los horrores no fueron el único deleite. El retorcido espectáculo Nightmare Fuel: Circus of Decay fue un espectáculo inquietante lleno de pirotecnia, artistas aéreos e ilusiones.
La laguna también cobró vida con fuentes, proyecciones de luz y música misteriosa. Y, por supuesto, los bocadillos temáticos de HHN también añadieron una capa oscuramente deliciosa a la noche.
No pude resistirme a comprarme un Mr. Cupcake gigante de FNAF y hundir mis dientes en su cabeza.
Entre casa y casa, las zonas de sustos se extendían hacia el paseo marítimo, donde acechaban zombis y gárgolas. Para cuando tropecé de regreso hacia el hotel, me sentía agotado, tembloroso y absolutamente vivo.
Esa es la belleza de Universal si vas en octubre: de día, son montañas rusas emocionantes, tierras mágicas y aventuras coloridas. De noche, monstruos y pesadillas que provocan sudor.
Universal siempre ha sido un lugar de extremos, pero este año, con Epic Universe abriendo sus puertas y Halloween Horror Nights en su mejor momento empapado en sangre, sentí que experimenté cada faceta del alma del parque.
¿Y sinceramente? Lo haría todo de nuevo en un instante, aunque quizás la próxima vez mantenga un estómago más fuerte para Art the Clown.